• Cada mes de agosto, tras la leva, los barcos vuelven a la Lonja Vieja.
  •  Durante estos meses, los carpinteros de ribera los pondrá a punto.

Los barcos de nuestras almadrabas, testigos directos de esta pesca trimilenaria, vuelven cada mes de agosto a la desembocadura del Río Barbate, poniendo aquí punto y final a la temporada hasta el próximo año.

El azul de los barcos, el perfil de la ‘sacá’, la imponente e histórica lonja vieja con Barbate de telón de fondo son algunas de las postales que regala este escenario cuando termina la leva, última fase de la temporada que se inicia tras concluir la pesca del Atún Gadira, el salvaje y de almadraba, en junio.

Aquí, como desde hace cientos de años, los carpinteros de ribera ponen a punto estas embarcaciones de madera en el varadero.

El próximo año, la próxima temporada, cuando mayo asome, el atún rojo salvaje volverá a pasar por nuestras costas. Y las almadrabas de la OPP51 y sus marineros estarán preparados para recibirlos… como desde hace 3.000 años.

¡Hasta la próxima levantá!